Frases de canciones.

SEMANA DEL 17 DE ENERO

Yo me quedo aquí a tender mi pena al sol, en la cuerda de tender desolación.
Ni siquiera puedo consolarte, aunque no se lo que daría yo, por retenerte al menos un instante, el extraño soy yo.
Apareces tú y me das la mano, y despacito me dices susurrando que escuche tu voz.
Ya son demasiados abriles, para tu amanecer desbocado, mejor que me olvides.
Luego empezaré a coser te quieros en un papel...
¿Quién te vio y no te recuerda?
Todas las noches las mismas dudas, ¿qué fue de todos aquellos besos?
Y yo jamás te olvidaré, tu acuerdate también de mí.
Y nunca gano, pero no dejo de perder.
Te has marchado, ya te has ido. Y ahora sé lo que he perdido. Es el final que no quisimos, pero que llegó.

SEMANA DEL 10 DE ENERO

Mira a tu alrededor y llora, ¡dime qué cojones se valora!
¡Qué la vida se nos va, cómo el humo de ese tren, como un beso en un portal!
Ven, que vamos a hacer un pacto yo y tu sonrisa.
Entiende que me cueste volver a creer en mi mismo.
Siempre nos quedará el futuro y la duda de si durara.
Con el tiempo justo para una sonrisa al día.
Si creo en lo que creo no es por mí, sino por nosotros dos.
¡A mí tus musas me tocan el arpa!
 Hace tiempo, prometí escribirte una canción. Como siempre, mal y tarde, la tienes aquí.
¡Y no volveré a quererte tanto y no volveré a dejarte de querer!
Y un rato nunca ha sido para siempre.
Es-trés, dos, uno, cronómetros a cero.
Paseo por fuera para encontrar lo de dentro, sea lo que sea yo ya sé a lo que me enfrento.
Para serte sincero, te pienso más que todo lo que escribo, pero pido más de lo que quiero.
¡Vamos a bebernos tu y yo el mundo! ¡Vamos a esquivar la soledad!
Llámame, te quiero escuchar. Ya lo ves, no siempre me va bien. Al cantar, me duele el corazón. Y enloquezco cada noche, en cada actuación.
¡Yo no dejo por los suelos a quién no merece venganza!
Me haces irritarme y hablar mal, ¡ostia puta!, ¡como puedes ser tan subnormal!
No tengo nada para impresionar, ni por fuera ni por dentro.
Lo me llevará al final, serán mis pasos no el camino. No ves que siempre vas detrás cuando persigues al destino.
Nunca es lo que pudo haber sido. No es porque digas la verdad, es porque nunca me has mentido.
Tranquila, ya no volveré a llamar. No me volverás a ver. Esta vez me marcho para no volver.
Que no lleven las olas, que yo duerma contigo, que tu no duermas sola.