miércoles, 9 de febrero de 2011

Algunos caminos solo te conducen a la tristeza aunque trates de poner lo máximo.


    Una vez oí que el primer amor nunca se olvida. No sé cuándo ni quién lo dijo, pero estoy segura de que tenía toda la razón del mundo, el primer amor es inmortal. Ya porque es la persona que más te hace sufrir, la que te hace experimentar en carne y hueso lo que es sentir esa angustia que todos hemos advertido alguna vez; ya porque es la primera persona que te hace sentir vivo, alegre, que consigue que encuentres una razón por la que vivir, una razón para levantarte cada día; o ya porque es la única persona que consigue que esas cosas que nos hacen sentir dolor, sean la razón de nuestra existencia. Esa persona, sea por lo que sea nuestro primero amor, es el sujeto que consigue abrirnos las puertas a ese extenso mundo, querer, amar. Logra que luchemos día a día por ella sin ni siquiera esperar recibir nada a cambio. La primera persona por la que nos llenamos de celos cuando notamos que podemos perderla, y por la que nos llenamos de lágrimas cuando ya la hemos perdido. Por la que adquirimos nuevas inquietudes. Con la que aprendemos mano a mano el significado del la palabra “amor”, con la que creamos un mundo, un auténtico universo únicamente hecho para los dos. Y lo más importante, es la primera y única persona que consigue qué olvidemos el cómo, el cuándo, el dónde… hace que perdamos toda noción del tiempo, solamente existe esa persona en nuestra vida. Sólo existe un nosotros, y un para siempre.
    Todo tiene un final, ¿no? Anda que no da vueltas y vueltas la vida. Pero después de todo lo que te ha dado esa persona, ¿no merece la pena seguir soñando? ¿De verdad merece la pena olvidar a la persona que te ha enseñado a amar? Merece la pena seguir hacia delante, despertándose cada mañana con una gran sonrisa, por el simple hecho de haber vivido esa historia. Merece la pena vivir, porque fue esa persona quien te enseño la vida.

"No se preocupe, yo tampoco me acordaría de mí." (American Beauty)

lunes, 7 de febrero de 2011

Porque uno y uno no siempre son dos.


-          Pero te tendría que doler lo que hace…
-          Le quiero.
-          Precisamente por eso lo digo. Si quieres a alguien necesitas tenerle a tu lado, sentir su cariño.
-          No, si quieres algo, no tiene que importarte el hecho de dejarlo libre, porque sabes que volverá. Simplemente estoy haciendo eso. Quiero que esté lejos de mí, ¿sabes para qué?
-          ¿Para qué?
-          Para que se de cuenta de que es a mí quién a quiere. Déjalo. El es feliz así, todos tenemos derecho a unas vacaciones, ¿no? Yo sé que algún día se acordará de mí y volverá. Tengo todo el tiempo del mundo para esperarle. 

"¿Creéis qué lo tiene todo planeado? ¿O va improvisando sobre la marcha?" (Piratas del caribe)

domingo, 6 de febrero de 2011

Y me obligaste a seguir hacia delante.

    
    No sé como lo planifiqué, pero ahora estoy lejos. Ni siquiera se como lo hice, pero por primera vez y después de largos meses de espera abandoné ese sitio, convencida de que yéndome cesaría el dolor. Creí que dejando aquél lugar cesaría tu búsqueda por las calles, por los parques, ¡por todos los rincones de esa maldita ciudad!
    Pero, indistintamente del punto de partida y del punto de llegada, una persona tiene que pagar por lo que hace, tanto lo malo como lo bueno. Así que, finalmente, me di cuenta de que tengo un largo camino por delante. Qué por mucho que hullas, tú pasado siempre te perseguirá. Que viviré experiencias nuevas y que reharé mi vida, pero que vaya dónde vaya, conozca a quién conozca y haga lo que haga, sé que volveré a verte, ya sea a este o al otro lado del continente. Estoy convencida de que nos volveremos a encontrar. Porque la vida a veces es perfecta, ¿sabes? Siempre te acaba compensando por todos los malos experiencias que te suceden. Pero para eso, tienes que aprender a levantarte y comenzar a andar, seguir hacia delante, porque no puedes retroceder en el tiempo y evitar tropezar con esa piedra, pero si puedes volver a coger el mismo camino y esquivarla. ¡Hay que aprender a no volver a cometer los errores que tanto daño causaron! Pero para eso hay que querer asimilar las cosas. Tampoco queda más remedio, no puedes huir de tu pasado, ya que tarde o temprano, te volverás a encontrar con él.

"Cuanto más difícil es hacer algo, mayor es la recompensa que te espera al final." (Big fish)

sábado, 5 de febrero de 2011

The same mistake again.


-          ¿Qué es para ti la esperanza?
-          Algo que se tiene, que te hace pensar que hay cosas que pueden pasar, ¿por qué?
-          No sé, del Bosque dice que la esperanza es una condición, pero yo no creo que sea del todo cierto…
-          Para mí la esperanza es un pensamiento de algo que creemos que puede pasar, nada más.
-          Entonces, ¿la esperanza implica querer algo imposible o muy improbable?
-          No, lo imposible no tiene ninguna esperanza. Lo muy improbable sí. Pero eso no tiene nada que ver con la esperanza. Se puede tener esperanza por cosas muy difíciles y por cosas muy sencillas. ¿Y tú qué opinas?
-          Yo creo que es un sentimiento, no un pensamiento ni una condición. Es sentir que algo que tú quieres que pase, puede pasar. No puede ser nada malo, ya que hablar de esperanza, acarrea consigo el hecho de confiar en algo que deseas que ocurra.

    “Mientras hay vida hay esperanza”, dice un viejo refrán. La esperanza nunca se pierde, o por lo menos yo nunca la he perdido, pero cómo saber si es necesario perderla. Si nos parásemos a pensar un poquito, nos preguntaríamos si la esperanza en sí es mala o no. Porque, ¿qué hace más daño, la espera de que pase algo bueno o padecer lo malo que ocurre cada día? Simplemente esperamos que ocurra algo agradable, beneficioso para nosotros, pero si esa espera es dolorosa, cómo saber que estamos haciendo lo correcto. Si aún en una situación muy penosa la esperanza es lo que nos ayuda a ser felices, no nos queda otro remedio que seguir ese camino, y poco a poco el tiempo será quién nos aclare las cosas, y quién decida si hemos hecho lo correcto o no.

"-Tú estás acostumbrada a ganar, y no se es un líder hasta que se ha perdido." (El núcleo)

martes, 1 de febrero de 2011

A veces en la vida hay que saber luchar, no sólo sin miedo, sino también sin esperanza.


    ¿Qué sí a mí no me dolió? ¡Pues claro que me dolió! Pero la diferencia fue que a tú mí me heriste el corazón, y que yo a tí ni te toqué, te hundiste tú sólo gracias a tu maravilloso orgullo. Por eso no puedes entender ni la mínima parte de lo que piensé. Tú sentiste una cosa que yo en mi vida sentiré, porque a diferencia de tí, yo no tengo orgullo. Lo perdí todo mientras estaba a tu lado.
    Pero que tampoco me arrepiento, ¿sabes? Pasó y pasó, y si lo hice fue porque te quería. Nunca serás capaz de entenderme porque nunca serás capaz de sentir algo tan sumamente fuerte por nadie. Alguien orgulloso no deja espacio al amor. No deja que ninguna persona se convierta en lo más improtante de su vida, porque lo más importante siempre será él.

No es necesario que le perdones hoy, pero perdónale. (Recuérdame)