Mi padre me enseñó que en el ajedrez un rey se vuelve débil sin su reina, como la Torre Eiffel y París, y yo no era nadie sin estar a su lado.
"Y un día me besaste. El tiempo pasaba, el tiempo volaba, y todo parecía tan fácil, tan sencillo, tan libre, tan nuevo y tan único..."
Que nade podía salir mal..
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